Para nadie es un secreto que muchos países están enfocados en proporcionar herramientas que permitan crear emprendimientos innovadores porque esto, por supuesto, acelera sus economías. Gracias a este escenario, grandes empresas se dedican a observar minuciosamente a los emprendedores y sus ideas para, después, hacer un proceso de fusión o adquisición.
Entonces, muchachos, después de esta introducción, vámonos a las ventajas que trae esto.
- Mayor rentabilidad: los instrumentos de producción entran a ser manejados por un único gestor. Esto logra que los costos se reduzcan y que la rentabilidad aumente.
- Mayor solidez: porque ese emprendimiento que recibe capital (por la fusión o la adquisición) puede ahora (con el dinero) hacer inversiones importantes en sus necesidades.
- Buenos aportes: ¡por supuesto, muchachos! Cuando una compañía se fusiona o adquiere un emprendimiento, en la mayoría de casos, está dispuesta a transferirle todo su conocimiento: económico, administrativo, técnico y comercial para que el emprendimiento crezca y pueda competir en el mercado.
- Nuevas sinergias: el emprendedor entra a tener una mayor participación en el mercado, influir en el precio de este y mantener niveles de inventario constante. Mientras que, la gran empresa, adquiere nuevos talentos, productos innovadores y mayor nivel de competitividad. ¡Un gana-gana!
Ya los imaginamos pensando «de esto tan bueno…» Tranquilos. También analizaremos las desventajas porque para las buenas decisiones: buena información. Aquí vamos.
- Reducción del equipo: sí, muchachos. Normalmente las fusiones implican esta renuncia. Esto, claro, generará un ambiente laboral diferente, pues la empresa grande ya tiene una cultura muy definida y se pueden presentar choques entre los equipos generando dificultades.
- Control del emprendimiento: muy posiblemente cuando se realiza una adquisición, la gran compañía quiera tener el control del emprendimiento y esto puede generar mal entendidos.
Nuestras recomendaciones, muchachos, frente a estas desventajas es que realicen un proceso claro, transparente y con tiempos prudentes para conocer las perspectivas de ambos lados. Además, que estructuren muy bien el proceso due diligence, es decir, que conozcan la situación real de la empresa que se fusiona o adquiere parte. Y, finalmente, que estructuren unos documentos sólidos que les permitan, en un futuro, mitigar contingencias: acuerdos de accionistas, contratos, reformas estatutarias.
Posdata amigable: en general, los procesos de adquisiciones y fusiones traen muchos beneficios para los emprendedores; siempre y cuando se hagan de manera acertada. ¿Un ejemplo cercano? Hatsu, un emprendimiento de té fue adquirido por Postobón S.A en 2015.